¿Qué harías si, después de un concierto multitudinario de Muse, el único taxi que encuentras no está de servicio y su dueño es el ser más huraño de la ciudad? Miriam Blake lo tiene claro ¡Secuestrarlo!
Miriam es despreocupada, alegre y cabezota y, pese a que su madre se empeña en emparejarla por todos los medios, ella no siente la necesidad de complicarse la vida con un hombre. Y menos aún, de complicársela con el taxista más borde de todo Nueva York.
MI OPINIÓN PERSONAL:
Miriam es nuestra protagonista, una chica fuerte e independiente que de hecho acaba de hacer un gran cambio de vida, ha dejado un trabajo estable para lanzarse como emprendedora en un negocio con dos jóvenes (uno de ellos es su hermano), negocio que absorbe todo su tiempo y energía que por ahora no les da mucho beneficio, pero por el que de verdad siente pasión. Aparte de eso es lanzada y directa, algo alocada y eso me encanta porque no es la típica joven desvalida
que necesita ser rescatada (que ya os digo que también me gustan estas historias pero a veces satura el encontrar "personajes fotocopia" de una novela a otra).
No podéis perderos el primer encuentro entre Miriam y Patrick, me he reído como nunca y creo que es de los mejores que he leído en novela romántica, precisamente por lo atípico y divertido de la situación, esta chica es mi ídolo y a Patrick hay que hacerle un altar. #Noospoileomas
El protagonista masculino es un hombre serio y taciturno, borde como sólo él puede ser, pero al que debéis dar una oportunidad de darse conocer,... porque no todos los lobos son malos, preguntadle a caperucita.
Los secundarios acompañan muy bien la historia, y de Declan no hay palabras me enamoró nada más conocerlo.
¿Lo malo que le encontré al libro? que se me hizo muy corto, hubiera disfrutado con un poquito más de historia, con algo más de desarrollo, pero voy a quedarme con eso que dicen por ahí, de que "lo bueno si es breve dos veces bueno".
Sin duda leeré algo más de esta autora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario